Un Dios vulnerable
Pedro Ugarte
Hablo de los rinocerontes de Sumatra (una especie de pequeñas proporciones, pacífica y huidiza, que acaso ya se haya extinguido) y de las melancólicas conjeturas que sobre ellos recogen los libros de ciencias naturales: algunas parejas en la jungla de Indonesia, algunos ejemplares cautivos en zoológicos, quizá un solo individuo vagando por remotas montañas de Birmania, aislado para siempre.
La imagen perfecta de la tristeza será el último superviviente de esa especie. Y su muerte anónima, en el mayor recogimiento, será también la muerte de un dios hermoso y vulnerable.
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